La Vuelta al País Vasco se ha convertido con el paso de los años en la 2ª carrera por etapas más importante a nivel nacional, sólo superada por la Vuelta a España. Y todo ello con un estilo de recorrido muy definido, apostando claramente por la media montaña. Algo lógico por otra parte teniendo en cuenta la orografía de la zona y también su ubicación en el calendario, apenas unos dias antes de la disputa de «las clásicas de las Árdenas»: Amstel Gold Race, Flecha Valona y Lieja-Bastogne-Lieja.

Pero afortunadamente esta apuesta por un tipo de recorrido no ha significado que se repitan las mismas etapas año tras año, como si pasa en otras pruebas. Las posibilidades del Pais Vasco, sobre todo a nivel de media montaña, son enormes y esta carrera suele aprovecharlas bastante bien. Al igual que hacen los ciclistas, ofreciendo habitualmente un gran espectáculo durante casi todas las etapas.

Sin embargo, la edición del año pasado fue un poco decepcionante , reduciéndo la dureza respecto a otros años (a pesar de ser bastante exigente) y sobre todo con una colocacion de los puertos demasiado lejana a meta en varias de las etapas, haciendo que la dureza la sufrieran los corredores … pero no la pudieran disfrutar los espectadores.

El recorrido de este año es mejor (al menos en nuestra opinión), pero no llega a ser completamente redondo ya que va de más a menos según avanzan los días. No sabemos hasta que punto la coincidencia de fechas con la Semana Santa habrá condicionado a los organizadores, pero que las 3 etapas finales se desarrollen en una misma zona, alrededor de Zalla y pasando nada menos que 5 veces por el puerto de Beci, parece un poco excesivo. Sobre todo si hacen bucles que alejan los puertos de meta, como pasa en la 4ª etapa.

Análisis del recorrido etapa por etapa (click para ampliar en todos los perfiles):

1. Ataun – Ataun  (142,5 km) Rutómetro

Dificultades montañosas: Urkillaga (km 19), Olaberría (km 28,6), Eizaga (km 43,6), Deskarga (km 48), Udana (km 67,5), Atagoiti (km 81,2), Albatzizketa-Larraitz (km 121,6), Gaintza (km 131,8), Lazkaomendi (km 131,5).

La carrera empieza con una maratón de pequeños puertos, con 30 kilómetros finales realmente movidos y en los que los favoritos no pueden despistarse, especialmente en la «emboscada» de Lazkaomendi:

La única pega es que la meta podría haber estado situada en Lazkao, eliminando los 4-5 km finales de llano. En cualquier caso, es una primera etapa realmente interesante.

2. Ataun – Villatuerta  (164 km) Rutómetro

Dificultades montañosas:  Lizarrusti (km 12,5), Lizarraga (km 34), Etxauri (km 73,3), Guirguillano (km 75,4), Mañeru (km 102), Lezaun (km 137)

Un etapa en principio propicia para el sprint, aunque el recorrido rompepiernas provocará a buen seguro intentos de escapada. El último puerto, Lezaun, está a 27 kilómetros de meta, pero no  tiene demasiada dureza. Para los favoritos, jornada de transición en vísperas de la etapa de Arrate.

3. Villatuerta – Eibar/Arrate  (172,5 km) Rutómetro

Dificultades montañosas:  Azazeta (54,5 km), Elgeta+Karabieta (km 127), Ixua (km 137,9), San Miguel (km 152,2), Ixua-Arrate (km 169,5)

La etapa reina del recorrido. Y curiosamente es la que tiene menos puertos … pero están magnificamente colocados y son muy exigentes: tanto Karabieta como el doble paso por Ixua tienen dureza suficiente para romper completamente el pelotón.

El final en Arrate era un clásico de la Bicicleta Vasca, y con la fusión de esta carrera y la Vuelta al País Vasco, es casi seguro que volvamos a ver esta llegada en años venideros. El tramo duro son casi 4 kilómetros al  9% de media hasta llegar al cruce del alto de Ixua. Desde ese punto, en el primero de los pasos se girará hacia la izquierda, mientras que en la ascensión final se seguirá recto hasta coronar el alto de Usartza, descendiendo después ligeramente hasta alcanzar la meta en Arrate:

4. Eibar – Gueñes  (161 km) Rutómetro

Dificultades montañosas:  Areitio (km 4,8), Urkiola (km 29,0), Bikoitz Gaine (km 65), Gárate (km 87,5), San Cosme (km 102,4), Humaran (km 111,6), Beci (km 128,0)

Si la etapa del día anterior es un ejemplo de como aprovechar al máximo la dureza, esta es justo lo contrario: con 140 kilómetros iniciales muy duros, sobre todo los puertos de Urkiola y Bikoitz Gaine, pero 20 km finales casi completamente llanos. Lo más probable es que los favoritos se «desentiendan», quedando la etapa para escapadas de corredores que hayan perdido tiempo en la general.

Lo peor es que podían haber evitado ese llano terminando la etapa en el primer paso por Zalla, sin hacer el bucle final, dejando para la jornada siguiente el final en Gueñes. O mantener en esta etapa el final en Gueñes pero subiendo antes Humarán. De todas las opciones para la parte final, han escogido la peor. Y si la intención de los organizadores era hacer una etapa menos exigente, no se entiende la inclusión de tanta dureza en los primeros 70 kilómetros.

5. Gueñes – Zalla  (169 km) Rutómetro

Dificultades montañosas:  Escrita (km 35,5), Ubal (km 51,5), Escrita (km 68), Beci (km 92), Humaran (km 116,8), Beci (133,3 km), Beci (km 157,5)

Otro maratón de pequeños puertos por la zona de Zalla, aunque en esta ocasión el último puerto (Beci de nuevo), está mas cerca de meta, a 11,5 km. Si bien esa distancia se podia haber reducido a sólo 7-8 kilometros, ya que dan un pequeño rodeo por la Herrera. Puede que lo hayan hecho para evitar problemas de cruces con los corredores que vayan descolgados.

6. Zalla – Zalla  (24 km) Rutómetro

El último día, una crono bastante dura con salida y llegada en Zalla, subiendo nuevamente el puerto de Beci. Esta misma crono se hizo en el año 2006.

En resumen

Un recorrido exigente pero un poco extraño, con 3 etapas alrededor de Zalla, y que va de más a menos , siendo la 1ª y la 3ª jornada las más interesantes a priori junto con la crono final. Si hubiera que darle nota, un Bien sería lo justo desde nuestro punto de vista.

Lo mejor es que siguen apostando por recorridos plagados de puertos, carreteras secundarias y «emboscadas» como la de Lazkaomendi. Además, la etapa de Arrate tiene 55 kilómetros finales para enmarcar.

Lo peor es que las etapas de Zalla parecen metidas con calzador, como si les sobrara una jornada y no supieran donde colocarlala. Es posible que la coincidencia con la Semana Santa (o incluso la crisis económica) les haya perjudicado en este sentido, pero eso no obligaba a hacer el bucle de la 4ª etapa que aleja Beci de meta. Podrían haber optado por hacer una etapa muy dura y otra más llana, pero se han quedado a medio camino, metiendo bastante dureza pero que seguramente será desaprovechada por estar al principio de las etapas.

Un tema secundario pero que creemos debería cuidar más la organización son los perfiles oficiales , tanto de las etapas como sobre todo de los puertos, ya que la mayoría tienen datos incorrectos. Por eso en este análisis los enlaces de los puertos son de otras paginas, especialmente APM.