En el documento Posibilidades de Andorra para el Ciclismo Profesional, uno de los finales de etapa que se proponían era el Llac d’Engolasters, una subida corta pero empinada, ya fuera de forma directa o tras La Comella, novedosa pues no se ha visto nunca en La Vuelta y además se puede encadenar bien tras La Rabassa, Coll d’Ordino por Ordino, La Gallina si se subiese por Fontaneda (4km sin asfaltar)… incluso sería un buen final tras el Port d’Envalira por Ax les Thermes.
Pues bien, queremos mostrar en esta entrada que es factible montar en su cima una meta. Primero, ya la Volta a Catalunya finalizó allí una etapa, y en segundo lugar mostramos en las siguientes fotos aéreas de Google Earth que hay suficiente espacio disponible:

Marcado en rojo el espacio real de la cima. Cada una de las pequeñas manchas de colores en el parking son coches, para tener una referencia.

Ésta es la última recta de la subida, hay dos pequeñas explanadas a cada lado de la última herradura, y una carretera que sale justo después de ésta y que enlaza con el camino que bordea el lago, marcada en rojo también.
Además apenas 2 kms más abajo está el pueblo de Sant Miquel de Engolasters, donde hay también varias explanadas de este tipo. Además, en la carretera marcada en rojo en la última foto (que se convierte en pista en la zona del lago) hay dos restaurantes más y algún chiringuito. Tendríamos así 2km donde desviar vehículos, y además, la pista continua hasta llegar a la carretera de Els Cortals d’Encamp, por lo que quizá se podría usar para desalojar vehículos de la cima, aunque en ella hay una barrera cortando el paso.