Del 10 al 16 de marzo, coincidiendo con la París-Niza, se celebra la 56ª edición de la Tirreno Adriático, la segunda prueba por etapas más importante de todas las que se disputan en el país transalpino, sólo superada por el Giro de Italia, y una de las carreras de una semana con mayor relevancia y prestigio de toda la temporada, recuperando este año sus fechas habituales después de que en 2020 se retrasara hasta septiembre debido la epidemia del coronavirus. Y lo hace con una participación espectacular, plagada de estrellas y en buena forma.
La edición inaugural de la prueba tuvo lugar en el 1966, con salida en Roma y llegada en Pescara, siendo organizada por el Velo Club Forze Sportive Romane y con triunfo final para el italiano Dino Zandegù. Originalmente había sido anunciada como Tre Giorni del Sud, pero a la hora de la verdad su inicio en las orillas del Mar Tirreno, al oeste de Italia, y su final en las costas del Mar Adriático, al este del país, le dieron su nombre de Tirreno Adriático, siendo también conocida como “la carrera de los dos mares”, “la corsa dei due mari” en italiano.
Desde entonces se ha venido disputando cada año de un modo ininterrumpido, aumentando su nº etapas hasta un máximo de 8 en la década de los 90 (pasando a 5 en 1967, a 6 en 1977, a 7 en 1984, a 8 en 1990 y de nuevo a 7 desde el año 2002) y ganando prestigio, hasta situarse actualmente al mismo nivel que otras carreras de una semana mucho más veteranas, como la propia París-Niza. Asimismo, es una de las pruebas con fechas más estables del calendario, habiéndose celebrado siempre en el mes de marzo, salvo el año pasado.
Ya desde sus inicios fue considerada como la antesala de la Milán-San Remo, tanto por su recorrido, donde habitualmente han predominado los trazados rompepiernas y repechos cerca de meta, como por su cercanía a la “Classicissima”, la cual se disputa el fin de semana siguiente a la conclusión de esta carrera, haciendo que buena parte de los favoritos para San Remo la utilicen como banco de pruebas. Este es uno de los motivos de que en el palmarés haya tantos clasicómanos, destacando el belga Roger de Vlaeminck, conocido como “El Gitano” y que obtuvo 6 victorias consecutivas durante la década de los 70.
No obstante, a excepción de Vlaeminck, el palmarés está dominado por los italianos, con 24 triunfos, incluídos los dobletes de Francesco Moser (1980-81, además de 4 podios), Giuseppe Saronni (1978-82 y 2 podios) y Vincenzo Nibali (2012-13). También con 2 victorias están el suizo Tony Rominger (1988-89, más 2 podios), el danés Rolf Sorensen (1987-92, siendo 3º en 1988) y el colombiano Nairo Quintana (2015-17). En cuanto a los españoles, sobresalen Oscar Freire, con victoria en 2005, ganando además 3 etapas y la regularidad, y podio en 2002-04, y Alberto Contador, vencedor en 2014 y 3º en 2013. También ganaron Herminio Díaz Zabala en 1992 y Abraham Olano en 2000, siendo acompañado en el podio por Juan Carlos Domínguez.
El año pasado, en una edición marcada por su retraso de fechas, coincidiendo con el Tour, la victoria fue para el británico Simon Yates (Mitchelton), que arrasó en la etapa reina, con final en Sassotetto, consiguiendo un buen «colchón» de cara a la crono final, siendo acompañado en el podo por su compatriota Geraint Thomas (Ineos) y el polaco Rafal Majka (Bora), completando el top-5 Wilco Kelderman y Alexander Vlasov. En cuanto a los velocistas, destacar a Pascal Ackermann, ganador de 2 etapas y la regularidad.
Recorridos
Como decíamos al inicio, históricamente han predominado los trazados rompepiernas, siendo su característica más llamativa los finales “trampa”, con pequeños puertos cerca de meta o acabando directamente en un duro repecho, estilo clásica, así como los circuitos finales con varios pasos por la línea de meta, que suelen realizarse en 2-3 jornadas casi todos los años. También son habituales las etapas con largo kilometraje, incluso superando los 230 km, que sirven a los corredores para coger fondo de cara a la Milán-San Remo.
Sin embargo, desde hace unos 15 años ha cambiado el modelo, ya que si bien se han mantenido los trazados “ratoneros”, con circuitos finales y llegadas en repecho, también han incluído grandes puertos, algo que en los 90 y principios del 00 no era habitual. Así pues, en 2006 y 2007 hubo finales en San Giacomo, aunque en el 1er año suspendido por nieve. En 2009 le llegó el turno a Sasso Tetto como puerto de paso, repitiendo los 2 años siguientes (y últimamente como final, cota 1335 m), si bien en 2010 la ruta original era Forca di Presta, Frontignano y Arette, mientras que en 2012 programaron el duro Passo Lanciano, con meta en Chieti, y la subida a Prati di Tivo, aunque debido al hielo sólo se hizo este último, repitiendo ambos en 2013 ya sin suspensiones. En 2014 se subió de nuevo Lanciano, incluyéndose además Forca Capistrello y el tendido Selvarotonda, mientras que en 2015 la estrella fue Monte Terminillo, afrontando además el Poggio San Romualdo en la etapa previa, aunque muy lejos de la meta en Castelraimondo, repitiendo Terminillo en 2017.
Respecto a las cronos, su inclusión ha ido a rachas. En los 80 y principios de los 90 hubo siempre crono individual (y normalmente 2 por edición), mientras que desde 1993 hasta 1999 sólo se disputó una CRI larga más un prólogo. Ya en el siglo XXI casi todas las ediciones han tenido contrarreloj (faltando sólo de 2003 a 2005 y en 2010), siendo un tipo de etapa fija desde 2011 y por partida doble, con CRE inicial en torno a 20 km (aunque en 2015 no pudo disputarse por los daños en las carreteras, sustituyéndose por un prólogo) y CRI final de 10 km en San Benedetto del Tronto. Dejando de lado esta última década, la alternancia en la presencia de CRI fue clave en el tipo de corredores que ocupaban los primeros puestos: clasicómanos cuando no había crono y especialistas en esta disciplina cuando sí estaba en la prueba.
El equilibrio se consiguió en la edición de 2009, con etapas para todo tipo de corredores, jornadas clave bien diseñadas y colocadas del mejor modo posible: doble paso y final en Montelupone (estrenado en 2008), crono individual de 30 km y gran etapa reina con meta en Camerino -> vídeo, con mucho desgaste y Sassotetto de paso, en el lugar justo para romper y seguido por terreno quebrado. Y la carrera no decepcionó, con los ciclistas muy combativos y aprovechando el terreno para dar espectáculo, sobre todo la etapa reina. El trazado de 2010 era muy duro, con varias etapas largas plagadas de puertos. Pero supuso un paso atrás, al eliminar la crono y poner 3 llegadas en muros, quedando desequilibrado y sin que los escaladores necesitaran atacar de lejos, pudiendo esperar a los km finales y bonificaciones. Y así ocurrió, con llegadas bonitas pero sin lucha previa, aunque es cierto que hubo mala suerte, con la jornada reina modificada por la nieve.
En 2011 había etapas en línea muy parecidas, pero con un giro completo en el tema de las cronos, incluyendo una CRI corta la última jornada y crono por equipos como etapa inaugural. Un trazado llamativo y más equilibrado, pero algo repetitivo en la montaña, con 3 etapas duras pero en las que se echaba de menos algún gran puerto cerca de meta. El recorrido de 2012 era similar salvo por el estreno de Prati di Tivo, quedando un trazado más variado y completo, donde la única gran pega era el orden las etapas. Lamentablemente, hubo que suprimir Lanciano, haciendo que no hubiera ninguna etapa propicia para la batalla desde lejos.
La ruta de 2013 repitía varias etapas, como las cronos y los finales de Indicatore, Chieti y Prati di Tivo. Sin embargo, cambiaba el orden de éstos, mientras que la penúltima jornada era durísima. Un trazado duro y muy variado, con opciones para atacar de lejos, como ocurrió camino de Porto Sant’Elpidio, con triunfo de Sagan y Nibali volteando la general -> clasificación / vídeo. El resto de la prueba también dio juego, siendo votada mejor prueba por etapas de 2013, por delante del Tour. El recorrido de 2014 tenía características similares, tanto en el orden como en tipo de rutas, destacando la etapa reina de Guardiagrele, con Lanciano a 30 km de meta y que fue espectacular, con exhibición de Contador, que ya había ganado el día previo en Selvarotonda. En el lado negativo, la eliminación de lo que más juego había dado en 2013: la etapa de los muros de paso, haciendo en su lugar una jornada llana.
Para 2015 se anunció un trazado en la misma línea, si bien a la hora de la verdad se sustituyo la CRE inicial por una CRI de 5 km, debido a los daños por un temporal, y se modificó la 1ª jornada de montaña, eliminando San Vicino, que iba a ser el gran puerto de paso de ese año, sin ninguna explicación, lo que hizo que todo quedara para el Terminillo, con triunfo de Quintana bajo la nieve. La edición de 2016 estuvo muy condicionada por la suspensión de la etapa reina, con final en el propio San Vicino, en previsión de una nevada … que no se produjo, y con los organizadores negando alternativas. Una chapuza agravada por ser la única etapa de montaña, lo que hizo que el triunfo final se decidiera por la CRE y las bonificaciones, imponiéndose Van Avermaet.
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Recorrido Tirreno Adriático 2021
El trazado de este año vuelve a tener 7 etapas, después de la excepción que fueron las 8 jornadas que hubo en 2020, si bien mantiene la otra novedad de la pasada edición: la supresión de la CRE inicial, haciendo en su lugar una etapa en línea en torno a Lido di Camaoire. No obstante, el resto del recorrido tiene características muy similares a las de 2018, con etapas para los velocistas, aunque la de Gualdo Tadino con trampa; etapas de media montaña, en este caso con finales en Chiusdino, con 50 km finales interesantes, y Castelfidardo, la «etapa de los muros», con 4 pasos por un exigente circuito final, con una de las subidas teniendo un km al 15%; la jornada reina a mitad de la prueba, con llegada en Prati di Tivo, un puerto de casi 15 km constante al 7%, visto ya en 2012-13; y la clásica crono final en San Benedetto del Tronto, de 10 km llanos. Un recorrido atractivo y bastante equilibrado, echándose solo en falta una etapa con meta tras descenso de una cota dura, algo factible en Lido di Fermo.
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- Libro de ruta y guía técnica (PDF 13 MB)
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Etapas
1ª ETAPA (Miércoles 10 Marzo): LIDO DI CAMAIORE – LIDO DI CAMAIORE (156 km). Rutómetro / Salida – llegada / Últimos km
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2ª ETAPA (Jueves 11 Marzo): CHIUSDINO – CHIUSDINO (202 km). Rutómetro / Salida – llegada / Últimos km
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El ascenso final a Chiusdino, muy tendido
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3ª ETAPA (Viernes 12 Marzo): MONTICIANO – GUALDO TADINO (219 km). Rutómetro / Salida – llegada / Últimos km
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Los km finales, de ligera subida
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4ª ETAPA (Sábado 13 Marzo): TERNI – PRATI DI TIVO (148 km). Rutómetro / Salida – llegada / Últimos km
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Forca di Arrone / Sella di Corno
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El ascenso a Capannelle, largo aunque muy tendido
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Perfil detallado de Prati di Tivo
Prati di Tivo, muy constante en torno al 7%
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5ª ETAPA (Domingo 14 Marzo): CASTELLALTO – CASTELFIDARDO (205 km). Rutómetro / Salida – llegada / Últimos km
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Km enteros más duros en carrera
El muro de Castelfidardo, con un km 15%
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La irregular subida final, con tramos duros y descansillos
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6ª ETAPA (Lunes 15 Marzo): CASTELRAIMONDO – LIDO DI FERMO (169 km). Rutómetro / Salida – llegada / Últimos km
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El circuito final, al que se darán 4 vueltas, con doble curva a medio km de meta
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7ª ETAPA (Martes 16 Marzo): SAN BENEDETTO DEL TRONTO (CRI) (10 km). Rutómetro / Salida y llegada / Últimos km
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Participación
Como decíamos al inicio, la participación de este año tiene un nivel espectacular, claramente superior a la de París-Niza. Y es que la nómima de vueltómanos y clasicómanos es impresionante, destacando entre los primeros los últimos vencedores del Tour de Francia, Tadej Pogacar (UAE), a priori favorito, Egan Bernal y su compañero de equipo Geraint Thomas (Ineos), así como el actual ganador de Tirreno, Simon Yates (Bike Exchange); y entre los segundos al vigente campeón del mundo, Julian Alaphilippe (Deceuninck), el todoterreno Wout Van Aert (Jumbo), que quiere luchar por la general, y el ganador de Strade Bianche, Mathieu Van der Poel (Alpecin). En total, serán de la partida 25 equipos, los 19 World Tour y 6 Continentales Profesionales, completando un pelotón de 175 corredores.
Otros corredores importantes para la general y/o las etapas quebradas: Mikel Landa, jornada reina en 2018, y Pello Bilbao (Bahrain); Vincenzo Nibali, doble ganador de la prueba, y Giulio Ciccone (Trek); Nairo Quintana, vencedor en 2015 y 2017 (Arkea); Jakob Fuglsang, podio y etapa 2019, Alex Aramburu y Gorka Izagirre (Astana); Thibaut Pinot, top-5 múltiples ediciones, Valentin Madouas y Rudy Molard (Groupama); Davide Formolo y Rafal Majka, podio en 2020 (UAE); Joao Almeida (Deceuninck), podio en UAE; Romain Bardet (DSM); Domenico Pozzovivo y Simon Clarke (Qhubeka); Sergio Higuita y Alberto Bettiol (EF);Tim Wellens (Lotto), ganador en Besseges; Marc Soler (Movistar); Patrick Konrad (Bora); Greg Van Avermaet y Lilian Calmejane (Ag2r); Ilnur Zakarin y Roman Kreuziger (Gazprom); Zdenek Stybar y Kasper Asgreen (Deceuninck); Robert Gesink (Jumbo); Jan Bakelandts y Andrea Pasqualon (Wanty).
En cuanto a los velocistas, además de los ya mencionados Van Aert y Van der Poel, destacan Caleb Ewan (Lotto), afinando su forma para San Remo; Peter Sagan (Bora), aunque viene de pasar el coronavirus; Tim Merlier (Alpecin), reciente ganador de Le Samyn y GP Monsere; Fernando Gaviria (UAE), vencedor de etapa en otras ediciones; Davide Ballerini, con 3 triunfos este año, incluído OHN, y Álvaro Hodeg (Deceuninck); Elia Viviani (Cofidis); Ivan Cortina (Movistar); Davide Cimolai (Israel) y Niccolo Bonifazio (Total). Sobre la crono final, a priori el gran favorito es Filippo Ganna (Ineos), que en 2020 batió el récord de la CRI, llevando 8 victorias seguidas en este tipo de etapas. Intentarán romper esta racha el propio Van Aert, Stefan Küng, campeón de Europa, Tobias Ludvigsson y Benjamin Thomas (Gorupama).
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En cuanto a la retransmisión televisiva, la carrera se podrá ver en directo en España a través de Eurosport, conectando a las 13.30 h y con la llegada de las etapas prevista en torno a las 16.10 h, según el horario intermedio -> enlaces en steephill.tv.
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Plataforma Recorridos Ciclistas 
Enlazamos los vídeo resúmenes de las 2 etapas clave: Prati di Tivo, con una brutal ascensión de Pogacar, seguido por Yates; y la jornada de Castelfidardo, que entre la combatividad de los corredores, especialmente Van der Poel, la dureza de los últimos 100 km, con un sube y baja constante, y el mal tiempo acabó siendo espectacular, una de las mejores etapas de los últimos años:
Saludos.